Por si alguna vez te lo has preguntado, sí, los coches berlinas deben su nombre a Berlín, porque fue en la capital alemana allá por mediados del siglo XVII cuando se fabricaron una especie de carruajes amplios, de techo rígido, puertas laterales con ventanas y asientos cómodos. Un concepto similar, salvando las distancias, al que puedes encontrar en las berlinas de segunda mano que te ofrecemos, ya sean diésel o gasolina. Aunque suelen llamarse también por el nombre de sedán, no son exactamente lo mismo. Ambos son coches convencionales de tres volúmenes: la zona del motor, el habitáculo y el maletero. Sin embargo, la estructura interna varía, porque mientras en los coches sedán hay una disposición de los espacios bien diferenciada, en los berlinas el maletero y el habitáculo son más pequeños. A nivel práctico, otra diferencia es la luna trasera, fija e independiente del portón en los primeros e incluida en el portón en los segundos. En cualquier caso, son coches espaciosos, cómodos y robustos pero elegantes de cuatro o cinco puertas, ideales para hacer largos viajes. También la llegada de los SUV les ha perjudicado. Pero ni mucho menos van a desaparecer. Siempre hay amantes de las carrocerías estilizadas con buena aerodinámica que reduzcan el consumo, sin perder un ligero toque clásico. De hecho, en muchos países se consideran de alta gama y se usan los de Audi, BMW o Mercedes como vehículos de representación de dignatarios y personalidades. Pero hay berlinas o sedán más baratos de Peugeot, Opel, Renault o Lexus que te esperan en nuestras tiendas. Corre que vuelan.