Una de las principales bazas con las que cuenta el Hyundai i10 de segunda mano que vendemos en nuestros centros de ocasión es que está homologado para albergar cinco pasajeros, al contrario que muchos de sus rivales en el segmento de los utilitarios, como es el caso del
Renault Twingo o el
Fiat Panda. Eso indica que, pese a ser el más económico del fabricante nipón, no se resiste a ser un urbanita solo apto para la ciudad. Es, más bien, un utilitario polivalente, gracias a la optimización del espacio, un rendimiento pulido y una maniobrabilidad de las mejores. Sustituyó en 2007 al Hyundai Atos, siguiendo por cierto la nomenclatura del
Hyundai i30, y en 2014 se lanzó la segunda generación de un modelo solo disponible en mecánicas de gasolina, pero sí en acabados distintos como el Classic o el Comfort en los de primera generación y Klass, Style y Tekno en los de segunda. El Hyundai i10 de ocasión está orientado hacia un público joven que prioriza más el manejo que el espacio, a pesar de que no es tan pequeño como sus competidores. El equipamiento, sin ser excelente, es bastante bueno de serie para un vehículo de sus características. Y en lo que sí resulta imbatible es en el precio. Se trata de uno de los utilitarios más baratos del mercado, para satisfacer necesidades de uso diario por entornos urbanos y que pide mínima inversión con un mínimo mantenimiento. Poco más se puede pedir.