Mini de segunda mano: el valor de lo original
Originalidad no exenta de calidad. Emoción en la conducción y vehículos para conductores de ciudad con espíritu joven. Y hasta un punto transgresor en los cabrio. La historia de Mini es la de una marca de automóviles que más ha apostado por ser fiel a sus orígenes. Salvo por el logo, que precisamente en 2018 renovaba de cara a los nuevos Mini de segunda mano que lleguen a nuestras tiendas de ocasión, con el objetivo de aunar elementos del estilo inicial del Mini clásico, pero al mismo tiempo dar una imagen orientada al futuro. Cerca de cumplir los 60 años (el primero se fabricó en 1959), sigue siendo un referente en el segmento A, es decir, el de los coches más pequeños. Actualmente, la firma pertenece a
BMW, convirtiéndose en una parte imprescindible del grupo, en especial desde 2001, cuando se comenzó a fabricar el nuevo Mini One y Mini Cooper, anteriores a los
Countryman, Clubman y Paceman. Entre los hitos del Mini de ocasión está el de ser el automóvil más popular de los fabricados en Gran Bretaña y segundo entre los vehículos más influyentes del mundo, solo relegado por el Ford T. Comprar un Mini de segunda mano es adquirir un coche incluso de culto. No son muchos los modelos que pueden presumir de ser el protagonista de una película como “Italian Job” o el coche del cómico Mr. Bean. Dos curiosidades de un clásico que, sin duda alguna, ha sabido renovarse como ninguno. Ven ya a por tu Mini seminuevo. Te está esperando.