Volvo V40: seguro como siempre, económico como nunca


El Volvo V40 de segunda mano es el claro ejemplo de que se puede ser un compacto casi premium, pero tener un aire de coche familiar. Y al mismo tiempo, esencia deportiva. Una mezcla que puede parecer rara. Pero en el Volvo V40 no choca ni mucho menos. La tercera y última generación (de la que por cierto son la mayoría de modelos que ofrecemos) se presentó en 2012 (sustituyendo al Volvo S40) con la pretensión de liderar el segmento. Un objetivo demasiado ambicioso para quien tiene que competir con el BMW Serie 1 o el Audi A3. En contraposición a estos no ofrece tantas prestaciones puras, pero sí un precio mucho más competitivo, gran dinámica de conducción, poco consumo de sus motores y, por supuesto, seguridad. No extraña en un Volvo, del que también se sobreentiende que será muy fiable. Lo que no es tan corriente es su estética. En general, el Volvo V40 de ocasión es agradable de ver, con un aspecto impecable y casi hasta deportivo, en parte gracias a una parte trasera peculiar. En el interior deja de ser un compacto para casi ofrecer la misma amplitud que un familiar, lo que se traduce en un confort notable. Predominio de motores diésel D2 o D3 sobre gasolina y acabados a elegir en nuestras tiendas entre Básico, Kinetic, Momentum y Summum, el V40 de Volvo es diferente en su segmento. Por eso resulta tan interesante.